Una bomba peristáltica es una máquina que aplica el principio del peristaltismo, donde la constricción a lo largo del tubo, debido a su elasticidad, provoca fluctuaciones de presión. La tubería, que debe resistir el aplastamiento el mayor tiempo posible debido a una deformación elástica más que plástica, es un componente fundamental de la bomba. Es la elasticidad que permite que el tubo recupere su tamaño original y proporcione presión de líquido y capacidad de succión.
La bomba peristáltica HELIOS es la elección de las principales industrias en varios campos. Son adecuados para productos abrasivos, ácidos, sensibles, viscosos y densos. Las bombas pueden funcionar en seco, son autocebantes y reversibles. Funcionan sin válvulas ni sellos, lo que a menudo hace que otros tipos de bombas se rompan o funcionen mal. Estas bombas se pueden aplicar con éxito tanto en aplicaciones severas como el bombeo de lodos abrasivos, lodos o líquidos filamentosos de alta viscosidad, en aplicaciones que requieran una importante capacidad de succión, o que requieran la máxima delicadeza en el trasvase de líquidos para mantener sus características originales (sin emulsiones, sin espuma, sin contaminación). Se pueden utilizar en entornos explosivos y proporcionan una alta precisión de dosificación.